LANA MERINO

Historia de la lana Merino

La oveja merino se crió en España a finales de la Edad Media y se mantuvo como estricto monopolio español durante varios siglos; las exportaciones de la raza estaban prohibidas, y quienes se atrevían a hacerlo eran castigados con la pena de muerte.

Las cortes de varias naciones europeas recibieron rebaños durante el siglo XVIII, sobre todo Francia (donde se conocían como los Rambouillet), Hungría, los Países Bajos, Prusia, Sajonia y Suecia. Más tarde, la raza Merino se hizo popular en todo el mundo, especialmente en Sudáfrica, Australia y Nueva Zelanda. La American Merino y la Delaine Merino en América, la Australian Merino, la Booroola Merino y la Peppin Merino en Oceanía, y la Gentile di Puglia, la Merinolandschaf y la Rambouillet en Europa son sólo algunas de las razas, estirpes y variedades reconocidas que han evolucionado a partir del tipo original.

Una oveja puede producir de cuatro a cinco kilos de lana merina al año, ya que es una fibra natural y renovable. Además, esta fibra se ha desarrollado a lo largo del tiempo para mantener la comodidad de las ovejas en entornos difíciles. Estas ovejas pueden permanecer cómodamente a la intemperie a temperaturas bajo cero. Es una fibra realmente extraordinaria.

La raza merina se ha conservado gracias a la Asociación Nacional de Criadores de Ganado Merino (ACME) creada por l Ministerio de Agricultura en 1975 y a la iniciativa de un grupo de familias ganaderas.

Más de 100 ganaderías pertenecen actualmente a la ACME. Esta asociación dispone de un libro de registros donde certifican y garantizan la pureza de las ovejas merino.

¿Cuáles son sus orígenes?

Las tres teorías sobre los orígenes de la raza Merina en España son:

• la importación de rebaños norteafricanos en el siglo XII;
• su origen y mejora en Extremadura en los siglos XII y XIII;
• el cruce selectivo de ovejas españolas con carneros importados en diversas épocas, que dio lugar al desarrollo de su característica lana fina en el siglo XV.

Todas las teorías sitúan el origen de la raza merina en el norte de África, coinciden en que la raza se desarrolló posteriormente por la inmigración de carneros norteafricanos y una población inicial de ovejas norteafricanas similares a los tipos procedentes de Asia Menor.

Durante la ocupación islámica de España, la producción de lana no era especialmente importante, y los primeros registros históricos de lana inequívocamente merina sólo se remontan a principios del siglo XV. Se cree que las ovejas merinas modernas son el resultado de varios cruces entre ovejas churras españolas, ovejas laneras italianas e incluso tipos de ovejas inglesas, según estudios genéticos recientes; no está claro cuándo se produjeron exactamente estos cruces.

Independientemente de los orígenes exactos de la oveja merina, a finales del siglo XV España ya era un competidor directo de Inglaterra en el mercado europeo de la lana gracias a esta raza domesticada y productora de lana.

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Principales ventajas de la lana merino

La lana de oveja merina posee una serie de beneficios y propiedades naturales, entre las cuales destacan:

• Óptimas propiedades térmicas en situación de frío, puesto que es capaz de mantener la temperatura corporal de manera constante.
• Elimina o retrasa la aparición de olores. Semejante a otros tipos de lanas, la lana merino posee propiedades antibacterianas naturales, por lo que impide que el sudor se filtre en el tejido y provoque mal olor.
• Mantiene el calor, incluso si está húmeda o mojada.
• Es suave al tacto, por lo que no produce picores en la piel, a diferencia de otras lanas.
• Repele el agua, por lo que es una fibra ideal para la estación de lluvia.
• Contiene queratina, por lo que es una fibra que protege de los rayos ultravioleta.
• Es transpirable, debido en gran parte al diámetro de las fibras y los huecos de aire que se producen en el tejido.
• Al ser una fibra de calidad y fina, posee propiedades como flexibilidad y resistencia alta al calor.
• Es ecológica y biodegradable, al ser una fibra 100 % natural, al contrario que otras lanas mezcladas con fibras sintéticas que proceden de derivados del petróleo y tienen un impacto negativo en el entorno.